Bosón de Higgs

Bosón de Higgs

El botijo Bosón de Higgs representa uno de los mayores descubrimientos de la física moderna: la partícula responsable de otorgar masa a toda la materia del universo.
La superficie del botijo, cubierta de ecuaciones, muestra las fórmulas de la teoría de Higgs, que expresan matemáticamente la existencia de ese campo invisible que impregna el cosmos.
Sobre este fondo oscuro emergen formas orgánicas—flores, hojas y troncos—como símbolo de la conexión entre la física y la naturaleza, recordándonos que las leyes fundamentales del universo están profundamente entrelazadas con la realidad que nos rodea.
Los múltiples pitorros del botijo, algunos alargados como tubos de ensayo, evocan los experimentos realizados en el Gran Colisionador de Hadrones (LHC), donde el Bosón de Higgs fue detectado por primera vez en 2012.La textura vidriada, con sus juegos de luz y reflejos, parece dar vida a las ecuaciones inscritas, como si la propia cerámica vibrara con la energía de las partículas subatómicas.
Este botijo no es solo una pieza cerámica, sino una metáfora de la “Partícula de Dios”, el puente entre lo intangible y lo visible, entre lo teórico y lo natural.

© santiagomseptiencreado en Bluekea