My father reading a poem by Octavio Paz to his granddaughter Paula, my daughter.
I have always enjoyed intertwining my photographs with poems; I believe it is a good pairing that sometimes becomes magical.
Earphones are recommended.
Niña
Entre la tarde que se obstina
y la noche que se acumula
hay la mirada de una niña.
Deja el cuaderno y la escritura
todo su ser dos ojos fijos.
En la pared la luz se anula.
¿Mira su fin o su principio?
Ella dirá que no ve nada.
Es transparente el infinito.
Nunca sabrá que lo miraba.
Octavio Paz